Érase una vez una niña
Érase una vez una niña
con un risito en la frente;
cuando era buena , era exelente
pero cuando se enojaba no había quien la aguantara.
Un día trepó por la escalera
mientras sus padres la cena preparaban
-motivo por el que no la vigilaban-
y en lo más alto se puso boca abajo
y comenzó a gritar con desparajo.
Cuando la madre oyó aquel jaleo
corrió haciac el lugar como una ardilla
pensando:<<Alguien entró en la buardilla>>.
Pero cuando se dió cuenta de quien era le reprendió sebera.
willian j. bennett
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